Llego tarde a comentar esta serie de Netflix que me ha fascinado, con algún pero. Narcos narra la historia de Pablo Escobar y de cómo hundió y puso en jaque a todo un país -Colombia- durante los años del plomo o plata, como decían ellos a los policías y políticos a los que, amablemente, invitaban a recibir dinero por mirar a otro lado o a ser obsequiados con un balazo si se mantenían firmes en su deber.
La serie es una superproducción buenísima, con unos guiones que, como decía Susana, no te creerías nunca si no fuera porque son reflejo de lo que pasó en la realidad. Algunas cosas se han ficcionado. ¿Por ejemplo? En la serie muere algún personaje que en la vida sigue vivo. Pero cada hecho que te parece surrealista es real: como cada vez que ves algún crimen atroz -como el atentado que hizo explotar un avión con más de 100 pasajeros-, cuando Escobar usa dos millones de dólares para encender una chimenea para que su hija no tenga frío, o cuando alucinas con que a Escobar le dejen construirse su propia cárcel-parque de atracciones. En todos esos giros de guion te quedas boquiabierto al comprobar que fue así como pasó.
Me ha encantado también la música, que está escogida con mimo y te hace quedarte a ver los títulos de crédito hasta el final en cada capítulo. Y lo que más me ha gustado es que Narcos está hecha con empatía hacia todos. No describen a Pablo Escobar como un buen tipo pero cuando la cámara está en su casa, ves la realidad como podría verla su familia, y sientes el sufrimiento de sus hijos al ser perseguidos, etc. Insisto: no hay equidistancia porque la serie siempre retrata al hijueputa malparío Escobar como el monstruo que fue -asesinó o mandó asesinar a más personas que ETA-, pero te deja verlo por un agujerito que te lleva a sentir que lo estás observando sin filtros morales.
¿Cuál es el pero al que aludía al inicio? Creo que el director se equivocó al escoger para el papel de Pablo Escobar a un actor brasileño al que no se entiende nada de nada porque su dicción del castellano es horrible. Si ves vídeos en Youtube de Pablo Escobar hablando, también da la sensación de que el actor Wagner Moura ha pintado un personaje que parece menos listo, más atolondrado que el Escobar real, pero eso es más personal. Me resulta creíble aunque dé la impresión de ser más tristón y parado de lo que era el narcotraficante.
Otro acierto es que en algunos pasajes de la serie intercalen de pronto imágenes reales con las de ficción, pues cada vez que pasa te vuelves a echar las manos a la cabeza mientras comentas con asombro: “esas imágenes son de la realidad, aquello que ha contado la serie pasó tal cual muestran esos vídeos de los informativos…”. En fin…si no la has visto, te la recomiendo mucho. Porque si ya te he dado razones, además se une que vas a conocer más un trozo crucial de la historia de Colombia ;).
Coincido con casi todo, pero en lo del error en la elección del protagonista no. Supongo que al ir dirigida principalmente al mercado americano, les habrá importado menos lo del acento brasileño. A mí particularmente, me parece que gran parte del éxito de esta serie se debe a Wagner Moura, que borda el papel. Y por documentales y vídeos que he visto, creo que después de la serie tengo la sensación de que Pablo Escobar era más inteligente, visionario y sentimental de lo que realmente era. Te recomiendo que veas, si no lo has hecho, las dos películas de Tropa de Élite, que creo tuvieron mucho que ver en la elección del protagonista.