explotación

Droit de cuissage: también se explota en el mundo de la comunicación

El trabajo se paga; también si eres joven. A no ser que seas un virtuoso de la cocina…en cuyo caso, tienes pleno derecho a esconder los becarios que te quepan en el horno para que desde dentro coloquen, sin quemarse, los platos para que se vayan haciendo. Si puedes, mete algunos becarios más dentro del lavavajillas, con gafas de buceo para que no se les llenen los ojos de jabón, y así le dan un repaso a los platos para reforzar la labor de la máquina. De esto que pasa en cocinas, tenemos algún ejemplo actual en agencias de comunicación…

¿Cerveza y amor, o la explotación convertida en glamour?

Un anuncio que cabalga entre la historia de amor pura y la indecencia de dar brillo a una explotación encubierta. Trabajar en la cocina de un gran restaurante sí es un pago en especie suficientemente potente como para labrarte un futuro; hacer prácticas como camarero 6 meses seguidos, en cambio, intuyo que es poca riqueza en aprendizaje y muy poco edificante para la empresa que lo permite.